El Mouna es un pequeño barranco, demasiado corto para convertirse en el objeto de una visita a la zona, pero sin embargo es ideal para completar otra actividad, como la ascensión del espectacular Mont Aiguille (origen del alpinismo europeo allá por 1492) o en nuestro caso, el barranco Moules Marinieres.
El Mont Aiguille. Foto de www.trekearth.com |
Ubicación: población de St michel des Portes en Isere, zona de Vercors, Francia
Época: permitido todo el año, evaluar caudal teniendo en cuenta que el cauce donde comenzamos es muy abierto pero luego se encajona mucho. Tener en cuenta que saldremos por el río Pellas, que puede tener un caudal muy elevado.
Combinación de vehículos: Sí, sino, 3 km y medio de subida por la carretera. Si venimos de hacer el Moules Marinieres, pasaremos por Gresse en Vercors y bajaremos por la D8A, y a menos de 1 km de la población de La Batie, en una curva a la izquierda cruzaremos sobre el Mouna, encontrando a mano derecha un gran espacio para aparcar. El otro coche se deja 4 Km más abajo, tras cruzar el pueblo de La Batie, pero en esta ocasión justo tras cruzar un gran puente que pasa sobre el río Pellas.
Material: 2 x 25m. Tiene un rápel de 22 y todos los demás son más cortitos.
Aproximación: Inmediata.
Descenso: 1 hora.
Comenzamos en una zona abierta, cuando lo hicimos nosotros en el mes de Julio el río estaba casi seco y nos temíamos que el descenso se perdiera el poco agua que se veía. Afortunadamente al encajonarse ya parece otra cosa. Tras unos 200 metros de pateo cómodo por el cauce abierto del río, el río cae repentinamente y encontramos el primer rapel, de un árbol. Le siguen pequeños toboganes y destrepes y rápido llegamos al mayor de los saltos de agua, equipada con reuniones y pasamanos a ambos lados. Este rápel nos deja en una zona más abierta que en unos resaltes más tarde vuelve a descender y nos envuelve entre roca. Nuestro afluente el Mouna nos ha dejado en el Pellas y estamos recorriendo la segunda parte del descenso. El recorrido es bonito y disfrutón, rapelamos y hacemos varios toboganes hasta que el río se ensancha y divisamos el puente, donde encontraremos un camino para subir a mano derecha, que nos deja a escasos metros del coche.
Retorno: Inmediato, el río nos lleva hasta el puente del coche de retorno.
Combinable con: Moules marinieres
Topo/croquis: no encontramos croquis para este descenso, pero no plantea mayores dificultades con un caudal normal, la equipación es correcta, rápeles cortos y con buena visibilidad de la recepción.
Un recorrido corto, aunque a priori, cuando dejas los coches en los 2 puntos, no parece que se pueda recorrer en una hora sin ir rápido, pero así es. A nosotros nos sorprendió bastante, pues no esperábamos mas que un descenso para completar una tarde, pero resultó ser bonito y fácil, aunque nos hubiera gustado al menos el doble de agua...
Aquí unas fotos del descenso:
En el punto de partida... |
andamos junto al río, y el agua no abunda |
pero con el río encajonado tiene mejor pinta. |
Destrepamos y avanzamos |
hasta la cabecera del mayor rápel |
que descendemos |
rapelando poco a poco |
hasta llegar al río Pellas. |
El río se encajona de nuevo |
y llegamos a una bonita zona. |
Pasamos por una brecha entre la roca |
y de nuevo los resaltes se suceden. |
Pequeños rápeles |
y el río se abre, |
llegando al puente final. |
0 sartenazos:
Publicar un comentario