martes, 4 de mayo de 2010

Gran Diagonal a la Peña Telera. Pirineos

Fin de semana del 24 y 25 de abril.

En la Gran Diagonal


Queremos ir a la montaña el fin de semana pero no sabemos a dónde. Romo y yo decidimos ir a hacer la Gran Diagonal de Peña Telera, seguro que tiene una buena cantidad de nieve y ya no hay apenas peligro de avalanchas en el Pirineo.

El viernes es fiesta en Burgos, pero Romo tiene que trabajar así que salgo a las 6 de la tarde de Burgos y llego a Santo Domingo a las 7. También se une a la expedición el Buru, así que metemos todo en su furgo y a las 8 estamos en camino hacia Piedrafita de Jaca. Son las 11 de la noche cuando llegamos y empezamos a cenar.

 Cenando

Preparamos las mochilas antes de irnos a dormir, y nos acostamos a eso de las 12.

El despertador suena a las 3:30 de la mañana, solo hemos dormido 3 horas y media pero hay que ponerse en marcha si queremos pillar buenas condiciones de nieve. La temperatura a esas horas en el parking de Piedrafita es de 5ºC, así que cruzamos los dedos para que esté helando a alturas superiores.

4 de la mañana

A las 4:20 de la madrugada estamos con las mochilas a cuestas. La aproximación  se hace llevadera a esas horas, como estás medio dormido no te enteras, jeje.


A las 6 de la mañana llegamos a la parte baja del corredor, donde nos colocamos los arneses, crampones y preparamos la cuerda para más adelante.

 Buru preparandose

Mientras preparamos todo dejamos de necesitar los frontales y empieza a amanecer. En muy poco tiempo disfrutamos de un día despejado y de las montañas a nuestra espalda.

Romo comenzando a subir por el cono

La nieve está bastante mal, avanzanzo sobre una gran avalancha en la que la parte superior está algo dura pero te hundes muchas veces a pesar de ser todavía muy pronto.

 Cerca de la zona de estrechamiento

A medida que vamos entrando en el tubo la nieve se pone un poco mejor, pero sin ser gran cosa. Pronto, cuando la inclinación empieza a ser un poco mayor, vemos como hay una brecha que recorre el corredor desde arriba hsta abajo. En la parte baja es una marca pequeñita, pero a medida que subimos se hace más profunda convirtiendose en un enorme tobogán. Parece que se ha formado por el discurrir del agua desde el resalte.

Debemos avanzar por el tobogán porque está mucho más duro que la nieve de alrededor. Llega un momento en que es más alto que nosotros y la sensación de subir por ahí se hace un poco agobiante. Pequeñas piedras caen de vez en cuando por el tubo pasando muy cerca nuestro con un silvido nada agradable. En caso de que lo que cayera fuera una piedra de un tamaño considerable, no cabe duda que bajaría por el tobogán y nosotros estaríamos atrapados sin posibilidad de escape. Pero es la única manera de avanzar de una manera un  poco rápida.

A mitad de ascenso entre el comiendo del cono, y el primer resalte, en un punto en que podemos ponernos de pie cómodamente, sacamos las cuerdas y nos encordamos en ensamble. En cabeza va Romo que ya ha subido por aquí en otra ocasión. En el centro voy yo, y el último en la cordada es el Buru.

Preparando las cuerdas para el ensamble

La progresión es lenta poque debemos sincronizarnos a la hora de subir, cada uno está a unos 12 metros de anterior y tendríamos que responder rápidamente ante una caída de alguno de los miembros.

 Esto parece el tobogan de un aquapark

A los pocos metros de encordarnos, Romo tiene un resbalón y aunque se para en menos de un metro, se nos pone el corazón a 100, yo en un momento ya me había preparado para aguantar su caida clavando mis piolets con fuerza sobre la nieve dura.

 Subiendo en ensamble

Son las 9 de la mañana cuando llegamos al primer resalte. La verdad es que no hemos subido muy rápidamente y nos está costando avanzar, pero estamos contentos con el estado de la nieve.

Buru llegando al resalte

Pero una sorpresa nos espera en el resalte... esperábamos encontrar hielo aunque no estuviera en muy buenas condiciones, pero es un enorme trozo de granizado. El piolet entra en el "hielo" húmedo sin oponer ninguna resistencia, y por supuesto no ofrece ninguna seguridad para subir.  Creemos que podríamos ser capaces de subir el resalte por el lado izquierdo, pues sólo son 3 metros, pero esta es la primera de las dificultades.

El aspecto del resalte de granizado de limón

En la anterior ocasión cuando Romo subió no necesitaron asegurar en ningún punto, y recordaba este resalte como algo más que una pala más inclinada, pero hoy es algo dificil de superar, y es el más facil y pequeño de los problemas. El siguiente resalte es de 6 metros puede resultar un gran problema a superar y no estamos convencidos de hacerlo. A esto le tenemos que sumar que si ahora la nieve no es gran cosa siendo las 9 de la mañana, mejor no pensar como estará la rampa de salida a la que le da el sol desde bien pronto, y las condiciones para bajar por las otras rutas. Por eso no nos cuesta mucho llegar a la conclusión que es mejor bajar y dejarlo para otra ocasión con menores temperaturas nocturnas que nos preparen mejor el terreno.

Romo y yo llegando al final de nuestra ascensión

Es una pena después del madrugón que nos hemos pegado, pero bueno...
Esperamos durante un rato a un grupo de otras 3 personas que vienen detrás nuestro. Son unos valencianos que al ver las condiciones del corredor se lo piensan y un poco y al final deciden intentar superarlo. Necesitan algo más de media hora para conseguirlo, pero ascienden los 3 metros del resalte para continuar con el corredor. Una hora más tarde nos parece verles intentando rapelar el primer resalte, pero luego ya no volvemos a saber nada de ellos....

Los valencianos en el resalte

Pero a nosotros todavía nos queda descender todo lo que hemos subido, que no parece una tarea muy sencilla. Empezamos el descenso en ensamble, hasta que encontramos una roca en la que hacer un rápel. Unimos las 2 cuerdas de 60 metros y bajamos Romo y yo. La cuerda no corre al intentar recuperarla desde abajo, porque el rozamiento con la roca es enorme, así que Buru baja destrepando los 60 metros.

 Romo rapelando de una roca

Mientras Buru destrepa, Romo prepara una seta de nieve para hacer otro rápel. La seta no es muy grande, pero parece que es segura. Con un ancla y un par de estacas, reaseguramos la seta y me dispongo a probarla descendiendo otros 60 metros. Parece que la cosa funciona y también Buru rapela, pero como en la ocasión anterior, la cuerda no corre por la seta. Ahora le toca a Romo quedarse para quitar el ancla, las estacas y sacar la cuerda de la seta para destrepar acto seguido.

Con nuestra seta de nieve, preparandome para rapelar

Con Romo bajando los 60 metros que acabamos de rapelar yo hago otra seta de nieve y hacemos la misma operación, salvo que el turno de destrepar es mio, así que de reunión setera rapelan Romo y Buru y yo desmonto todo el tinglado para bajar de cara a la montaña.

180 metros más abajo de la primera reunión decidimos que hemos pasado el peor tramo y podemos seguir bajando a pelo sin usar las cuerdas, así que recogemos el material y poco a poco vamos bajando hasta llegar al comienzo del cono.

 Romo y yo en la parte más baja

Una gran piedra al sol será nuestro espacio para comer y descansar tras la retirada, pero contentos de las prácticas de técnicas de fortuna realizadas.


 Objetivo superado, seguimos vivos :-D

Después del merecido descanso volvemos al parking pasando por el refugio.

Foto en el refugio

Una vez en la furgoneta nos cambiamos y vamos al pueblo a tomar unas cervezas hasta hacer tiempo para cenar. A las 9 de la noche ya estamos en el saco y dormimos plácidamente hasta las 9 de la mañana de día siguiente.

Buru bajando al pueblo

El domingo pasaremos el día con Pili y Luis, unos amigos de Zaragoza a los que hacía mucho tiempo que no veíamos. El tiempo nos acompañó y pasamos las horas comiendo y bebiendo como buenos deportitas que somos :-D


Este no fue el fin de semana en el que subimos a la Peña Telera, pero otra vez será.

Escalada deportiva en Mallorca. Parte II

Día 5 - 1  Abril

Despertamos en el área de descanso que habíamos dado por buena la noche anterior y descubrimos que estamos en un mirador que yo recuerdo de años atrás en un viaje de fin de curso, que desde luego no se parece en nada a este que estamos haciendo. Al poco rato empiezan a llegar autobuses llenos de abueletes que en diferentes rediles se dirigen al mirador.

Antes de levantarnos

Para que luego digan que los hyppies son unos guarros


Tras la foto de rigor nos vamos a la siguiente escuela en el planing que se encuentra cerca de Estellencs.

 El mirador

Para llegar a ella tenemos que adentrarnos en una carretera cortada por desprendimientos, pero llegamos al destino sin problemas, donde escalamos unas cuantas vías ni fú ni fá, pero pasamos la mañana entretenidos y Chemita se lleva un 7a al segundo pegue a pesar de llevar un tiempo sin escalar. Además Zon por fin se digna a escalar por primera vez en el viaje... ya era hora.

 Manu en el 7a y Chema en un sexto


Pasado el mediodía recogemos y emprendemos el viaje a una de las mejores zonas recorridas durante el viaje: Santanyí. Desde luego el sitio nos impresionó desde el primer momento. Metros y metros de roca anaranjada se levantan sobre el mar convirtiendo el lugar en un marco incomparable para el escalador.

Santanyí

Llegamos al atardecer y recorrimos los sectores impresionados por lo difíciles que parecen las vías, pareciéndonos imposible que esto sea un 6a o aquello un 6b, pero entusiasmados por probarlas al día siguiente.

Nos vemos ante la necesidad de tomar una decisión, dormir en una casa en construcción en primera línea o encontrar otro sitio mejor (¿menos ilegal?), ya que el pie de las vías es bastante irregular y somos muchos para acoplarnos en los pocos sitios medio planos.

Como en el resto del viaje, la suerte nos acompaña y al final de los sectores, junto las vías más fáciles hay un espacio con hierba perfecto para dormir y a pocos metros de una calle donde aparcar los coches. Una vez tenemos claro dónde dormir, preparamos una señora cena a base de champis, huevo, bacon.... y nos vamos a dormir poco después.

 Durmiendo en Santanyí

Día 6 - 2 Abril

El primer día en Santanyí lo pasamos escalando varias vías, por desgracia perdimos algo de tiempo en la zona de los quintos a la izquierda del todo, donde las rutas no son muy recomendables, a diferencia del resto, con una roca arenisca muy especial y vías de gran calidad.

 Petra llegando a la cadena

Varias vías por debajo del 6b+ me parecieron muy guapas, sobre todo un 6a+ de diedro fantástico que se llama Colesterol Party. Muy curiosa también la vía Vino Tinto 6a desplomado con unos pasos muy divertidos.

Yo en Colesterol Party

 Sufriendo para ver el paso de un 6b

A última hora, fuimos a ver de cerca el arco de Es Pontas, bien conocido por los frikis y fanáticos por haberse hecho famoso gracias al Chris Sharma que ha sacado una increíble ruta de 9a+

 Pues es guapo el arco, ¿no?

Llegamos al atardecer, momento perfecto para hacer unas fotos, y decidimos que al día siguiente iremos a subirnos a ese pedrusco, si el tal Sharma puede, nosotros también!!!

 Que me den una cervecita y traigan al Sharma a darle pegues!!!

Después de la visita al famoso arco, nos vamos a dar una vuelta por el pueblo, donde tomamos algo, cenamos y a dormir.

Día 7 - 3 Abril

Es sábado y nos tomamos un día de relax, para empezar una vuelta por el mercadillo de Santayí, un café o cervecita y domingueo del bueno como si fuéramos guiris.

A eso de las 12 de la mañana volvemos al arco de Es Pontas. Romo Saúl y yo estamos dispuestos a subir y hacer un poco el tonto por allí. La primera complicación es llegar al arco. 10 metros de agua nos separan de la mole rocosa, y debemos nadar para llegar hasta allí. Decir que el agua estaba fría es decir poco, pero como machotes que somos nadamos hasta él lo más rápido posible.

 Saúl preparándose, yo subiendo y Romo un poco más arriba

Subimos por la parte derecha, muy facilmente hasta la zona superior. Asomarse al borde desde el punto mas algo impresiona bastante, mas bien acojona bastante. Un sartenazo a esa altura.... mejor ni pensarlo.

Foto cumbre :-D Hemos subido por el 9a, ¿eh?

Unos buenos calvos a la afición para amenizar la mañana y destrepamos para hacer una travesía alrededor del arco.

 Sharma también lo hace, pero las revistas no se atreven a sacarlo

Intentamos escalar algunos metros por el desplome pero está complicado y en el tercer intento oigo un chasquido en mi dedo corazón que me dejará sin escalar por un par de meses (por lo menos). Con el frío y el apretón me he lesionado y se me ha puesto la vaina del tendón como un pepino. Es lo que tiene meterse donde no le llaman.

 A punto de lesionarme

Recogemos el chiringuito y nos vamos a comer a una cala cercana.

La calita para comer y siestear

Para terminar el día, los no lesionados hacen un par de vías, entre ellas un 7a con una pinta muy guapa que saúl encadena un par de veces.

Saúl encadenando

A Romo le faltó un apretón

Para concluir las vacaciones, nos vamos a cenar a un restaurante, donde nos comemos unas pizzas de escándalo, unas cervecitas ricas y chupito para terminar la faena.

Volvemos a dormir cerca de las vías sabiendo que es nuestra última noche en la isla.... snif snif.

Día 8 - 4 Abril

Nos levantamos, desayunamos y recogemos todo para ir al aeropuerto. Tenemos el avión al mediodía, y hay que dejar los coches a las 12 de la mañana en el aeropuerto. Mientras nos estamos haciendo la última foto de grupo, se pone a llover con mucha fuerza.

 Última foto en la isla, volveremos....

Hay que ver que suerte tenemos!!! Nos montamos corriendo en los coches y nos vamos al aeropuerto. En 4 horitas estaremos cogiendo un avión hacia Burgos, y a las 5 de la tarde mas o menos ya estábamos en casa.

Un buen viaje en buena compañía y además bien baratito, en total fueron unos 280 € por persona con todo incluido:

- Billete de avión Burgos - Mallorca i/v: 155 €
- Bote para comprar comida y gasolina: 50 €
- Alquiler de coche: 62 €
- Cena en la pizzeria: 15 €
- Alojamiento: 0€
- Clubs de alterne: 0€
- Visitas a museos: 0€

Total: 282 €


¿Alguien da más por el mismo precio?

Hasta aquí el viaje a Mallorca... otro año más.